Somos parte de un proyecto de transformación social de nuestro entorno, donde acogemos, integramos y hacemos participar a todos los agentes
¿Qué es una comunidad de aprendizaje?
Es un proyecto de transformación de centros educativos dirigido a la superación del fracaso escolar y la eliminación de conflictos. Este proyecto se distingue por una apuesta por el aprendizaje dialógico mediante los grupos interactivos, donde el diálogo igualitario se convierte en un esfuerzo común para lograr la igualdad educativa de todos los alumnos.
La transformación está orientada hacia el sueño de la escuela que se quiere conseguir. El aprendizaje escolar no recae exclusivamente en manos del profesorado, sino que el logro de una educación de gran calidad depende de la participación conjunta de las familias, las asociaciones del barrio y el voluntariado.
Las comunidades de aprendizaje representan una apuesta por la igualdad educativa en el marco de la sociedad de la información para combatir las situaciones de desigualdad en las que se encuentran muchas personas.
¿Qué significa soñar en este proyecto?
El primer paso para la transformación de una escuela en comunidad de aprendizaje es el sueño. Las familias y los niños deben soñar lo que quieran que cambie en sus vidas, así como el profesorado y el resto de la comunidad educativa también debe soñar la escuela que querrían para sus hijos. Todos los agentes sociales deben expresar cómo sería el centro que les gustaría tener.
El sueño de nuestra comunidad de aprendizaje es elaborado conjunta y dialógicamente por todos los sectores que quieran implicarse: profesorado, familiares, alumnado, personal no docente, profesionales del ámbito social, asociaciones, entidades, etc.
Realizada esta fase, se forman las comisiones mixtas, que son la forma habitual en la que se organiza la comunidad educativa para alcanzar los retos y proyectos prioritarios. Estas agrupaciones, que pueden contar con alumnos, profesores, PAS, familias, asociaciones, etc., aseguran que todas las personas participan en diálogo igualitario. Su misión es trabajar para lograr los sueños.
¿Cómo se trabaja en la comunidad de aprendizaje?
Se llevan a cabo varias actuaciones educativas, como son los grupos interactivos, las tertulias dialógicas o los padrinos de lectura.
Los grupos interactivos son una forma de organización del aula de tal manera que los alumnos se dividen en grupos reducidos, heterogéneos, según niveles de aprendizaje, cultura, género, etc. Son agrupaciones en las que se establecen relaciones entre sus miembros por medio del diálogo igualitario. Cada grupo cuenta con la presencia de un adulto referente y el aprendizaje de los alumnos depende del conjunto de las interacciones en este entorno.
Los miembros de un mismo grupo trabajan sobre la misma tarea y es imprescindible que exista interacción mientras se lleva a cabo el trabajo. El resultado es que todos aprenden, incluso los que tienen más facilidad, porque ayudar al otro implica un ejercicio de metacognición que contribuye a consolidar los conocimientos, hasta el punto de ser capaz de explicarlos a otras personas.
Las tertulias dialógicas, son, sencillamente, leer para compartir. Un encuentro de personas para dialogar sobre clásicos de la literatura que promueve la construcción colectiva de significado, además de la aproximación a la cultura clásica universal y al conocimiento científico. Estas relaciones igualitarias desarrollan la solidaridad, el respeto, la confianza y el apoyo en lugar de la imposición.
En la práctica de padrinos de lectura se propicia la lectura dialógica, que es enriquecer la comprensión lectora con interacciones. Los padrinos, que pueden ser alumnos de mayor edad, familiares, profesores o voluntarios, acompañan y abren la práctica de leer a otros espacios e intervenciones.
¿Qué hace el voluntariado?
El voluntariado es una pieza importante en el proyecto de comunidades de aprendizaje. Partimos de la premisa de que para mejorar el aprendizaje de los niños, se deben aumentar tanto el número de interacciones que vive el niño como la calidad de estas interacciones en un plano de diálogo igualitario.
En este sentido, el voluntariado son personas de la comunidad, como familiares, exalumnos, personas del barrio, miembros de asociaciones del barrio, estudiantes en prácticas u otros profesionales vinculados a la comunidad, que con su participación y compromiso en el quehacer diario de la escuela aumentan el número de interacciones que viven los niños.
Se trata de interacciones impregnadas de sentido, en la medida en que a menudo son familiares, otros miembros de su comunidad, que representan referentes positivos que dan sentido a la educación de los alumnos. Por esto, la participación de los voluntarios en el aula facilita el aprendizaje y aumenta la motivación de los niños por el aprendizaje, creando un buen clima de trabajo.
Por otro lado, cualquier persona puede estar dentro de la clase, aunque esto no significa en ningún caso que el maestro pierda su rol dentro del aula, sino que los voluntarios vienen a ayudar. En ningún caso, el voluntario está solo en el aula, sustituyendo las funciones propias del maestro, que seguirá organizando y gestionando la clase.
El personal docente enriquece también su práctica, en la medida en que tiene en cuenta las aportaciones de los voluntarios. Se crea una comisión de voluntariado encargada de gestionar la incorporación de personas voluntarias en las diferentes actividades de la escuela y el aula. También se reúne para tratar temas vinculados a su participación en la comunidad de aprendizaje y participan también en la fase del sueño.
¿Qué papel desempeñan las familias?
Otra de las prioridades en las comunidades de aprendizaje es la formación de familias y familiares. En nuestra sociedad el aprendizaje depende cada vez menos de lo que ocurre en el aula y cada vez más de la correlación entre lo que ocurre en las aulas, en la calle y en la casa. La formación que se da a las personas adultas que conviven con los niños en el aula, es decir, el profesorado, fomenta su aprendizaje, pero aún lo hace mucho más la formación que se da a las personas adultas con las que conviven en sus domicilios.
Si dejamos a los familiares fuera de la escuela, seguramente, las familias sin recursos verán cómo sus menores están abocados al fracaso escolar y la exclusión social. En las comunidades de aprendizaje, no solo vienen a formarse sino también a participar en plan igualitario en las comisiones de trabajo que se crean para llevar adelante cada una de las prioridades.
En este apartado te ofrecemos diferentes recursos, artículos y documentos relacionados con las comunidades de aprendizaje que pueden ayudar a profundizar en este proyecto.
Bibliografía de interés:
- Racionero, Sandra; Ortega, Sara; García, Rocío; Flecha, Ramón. (2012). Aprendiendo contigo. Barcelona: Hipatia Editorial. ISBN: 978-84-938226-3-7.
- Aubert, A; Flecha, A ;García, C ;Flecha, R ;Racionero, S.(2008). Aprendizaje dialógico en la Sociedad de la Información. Barcelona:Hipatia. [El libro aporta la nueva concepción sobre el aprendizaje dialógico, que está sirviendo para superar las desigualdades de muchos niños de todas las condiciones y para avanzar en la excelencia en el aprendizaje de todos.]
- AUBERT, A; DUQUE, E.; FISAS, M.; VALLS, R. (2004). Dialogar y transformar. Pedagogía crítica del siglo XXI. Barcelona: Graó. [Puede ser el primer libro a leer sobre los planteamientos pedagógicos psicológicos, sociológicos, que dan origen a la mayoría de las experiencias educativas más transformadoras de la sociedad actual.]
- ELBOJ, C., PUIGDELLÍVOL, I., SOLER, M. & VALLS, R. (2002). Comunidades de aprendizaje. Transformar la educación. Barcelona: Graó.
Premio Valores
Asociación Antiguos Alumnos SAFA
Finalista “Innovación Educativa”
Escuelas Católicas
Premio Valores
Asociación Antiguos Alumnos SAFA
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